Y también se renueva El Mundo

La renovación de El Mundo tiene mucho que ver con el auge de Internet y la nueva apuesta de diseño. Las claves: color (del que carecía el medio impreso por los costes), fotografía (el protagonimo de lo visual) y reducción de texto. Una apuesta en la línea formal de la prensa gratuita.
Esta tendencia, seguida por otros medios extranjeros, recoge la tendencia (confirmada a través de los experimentos) de que estamos en una cultura profundamente audiovisual. Lo que no contiene imagen ni color, reduce su éxito. La prensa en papel, si quiere ganar la batalla y rescatar lectores, no sólo debe tener a un diseño casi arrevistado, sino completamente en línea con su competidor más inmediato: Internet.
La única forma de invitar a la lectura es que la información esté resumida en pequeños bloques de textos y valerse de recursos como los despieces. Ellos sirven para seguir publicando más información, pero aligeran y alivian notablemente el peso de la página.